¿Cuál es el problema?
Nuestra era es sinónimo de infraestructura digital, y la industria de las telecomunicaciones está a la cabeza para asegurar que los consumidores puedan recibir comunicaciones móviles, de datos y por satélite. Cuando los datos son tan valiosos, no es de extrañar que los estafadores sigan tratando de encontrar nuevas formas y métodos para adquirir esa información.
La cantidad de información personal que poseen los proveedores de telecomunicaciones es abrumadora: desde contactos y direcciones hasta pagos y credenciales bancarias de los clientes.
Encontrar el equilibrio perfecto entre la interacción fluida y el diseño seguro es clave para proporcionar servicios digitales al más alto nivel. Kaspersky Fraud Prevention ayuda a los proveedores a alcanzar el estándar de oro en la protección de datos y servicios.